Cómo elegir el sillón perfecto para el salón
El sofá es el rey del salón. De esto no queda duda alguna. Ahora bien, ningún salón queda completo sin su complemento ideal: el sillón. Aportan el descanso, la comodidad y la practicidad que necesitas con una inversión en presupuesto y espacio menor.
En artículos anteriores os hemos compartido nuestros consejos para elegir sillón reclinable de relax. Ahora vamos a centrarnos en qué tipo de sillón para salón comprar.
¿Cuándo incorporar un sillón en el salón?
Amueblar un salón no resulta tan sencillo, ¿verdad? Ya sea cuadrado, rectangular, tenga suficiente espacio o todo lo contrario, siempre se corre el riesgo de llenar esos espacios por exceso o por defecto.
Cuando estás en esta situación, y aunque el mayor servicio lo pueden ofrecer los sofás convertibles o las conjunciones de sofás 3×2, existe una tercera vía: comprar un sillón (o un par de sillones, todo dependerá del espacio y el tamaño de este, además del presupuesto, por supuesto).
Si tienes poco espacio, la solución más práctica son los sillones para acompañar a los sofás en el salón:
- Aumentas los asientos disponibles en caso de necesidad.
- Puedes jugar con ellos para la zona de estar o para un rincón de lectura.
- Los sillones individuales son más baratos.
- Redondean el estilo de la estancia, ya sea por contraste, o por continuidad.
Ahora bien, existen múltiples opciones de sillones: orejeros, estilo vintage, tapizados o los denominados sillones de diseño. ¿Por qué no optar por una bonita butaca?
Veamos qué elementos se han de plantearse antes de decidirse finalmente por un sillón para salón o no.
Elementos para valorar antes de comprar un sillón para tu salón
El punto de partida para comprar un sillón sea para el salón o para cualquier otra estancia, al igual que para adquirir un sofá, es la comodidad. Y este es un criterio completamente subjetivo. Depende de cada persona, incluso de cada miembro de la familia, pero es clave.
La estética es otro factor para considerar. Evidentemente, todos queremos que cada mueble partícipe de un estilo general, que aporte algo de calidez al espacio y, por qué no, también algo de personalidad.
Junto a estos dos baremos principales, para elegir el mejor sillón para tu salón debes evaluar estos otros factores.
Espacio disponible (y dónde irá)
Los sillones de salón son los complementos perfectos para estancias de menor tamaño o que presentan formas (rinconeras). Si dispones de mucho espacio, ayudan a cerrar el área o crean una propia, por ejemplo, con una mesita auxiliar.
Es más, el dónde se van a colocar los sillones en el salón también determinará si es más adecuado comprar dos unidades o será suficiente con un único sillón individual.
¿Cómo medir el espacio para saber si entran los sillones? La mayoría de los sillones para salón utilizan medidas estandarizadas, por lo que puedes utilizar diversos simuladores online para presentar tu salón y los elementos que lo van a componer (o que ya lo componen). No obstante, puedes utilizar estas referencias:
- Cuando el sillón se coloca ‘pegado’ a una pared, mide esta y resta 90 centímetros para salvar otros elementos y no comprometer la circulación en el espacio.
- El sillón individual se coloca habitualmente al lado derecho del mueble de mayor tamaño o frente a él.
El respaldo, o su altura, constituyen otro factor a considerar: prueba que sea ancho, estable y lo suficientemente alto para que te resulte cómodo relajarte. Piensa que, si vas a utilizarlo como base para las siestas, si no te apoyas correctamente las cervicales saldrás de ella con dolor de cuello.
La tapicería de los sillones
Tan importante es el tamaño como el tapizado. Elegir la mejor tapicería marca el estilo del mueble y del salón. No obstante, también has de atender al uso y, sobre todo, a los habitantes de la casa.
Por ejemplo, los sillones tapizados con algodón o mezcla algodón-poliéster son muy resistentes al uso, y fáciles de lavar, pero si en casa hay mascotas tendrás que eliminarlo de la terna: atrapan mucha suciedad (pelos, comida en el caso de los niños), y se enganchan fácilmente con las uñas (sobre todo con los gatos). Tendrá un muy mal envejecer.
En el caso de los sillones de salón tapizados con piel natural, el mayor obstáculo suele ser el precio, si bien son los más duraderos y resistentes, especialmente si no hay niños ni mascotas en casa.
Uno de los tejidos más demandados son las microfibras: incluyen tratamiento antimanchas para su lavado fácil, presentan una resistencia media y además son suaves al tacto. También influye que convierta a los sillones individuales en más baratos que los anteriores modelos.
El tipo de acolchado del asiento (densidad de la espuma incluida)
Otro activo que influye en la comodidad o no del sillón para salón es el acolchado del asiento (y del respaldo).
Los modelos más vendidos de sillones y butacas individuales son aquellos que emplean espuma de poliéster. Al fin y al cabo, son los que montan los sillones baratos, pero a cambio obtienes una durabilidad menor. Será suficiente siempre y cuando hagas un uso esporádico del sillón y para quienes gustan de asientos más blandos (de los que se hunde). Para el día a día no es una inversión rentable.
A continuación, en la escala, nos topamos con los acolchados de espuma de poliuretano, que ofrecen una buena relación calidad-precio, resultan cómodos y resisten bastante bien el uso continuado. Existe una versión de alta gama, la espuma de poliuretano de gran resistencia que también debes valorar. La firmeza de esta opción es mayor: se nota nada más sentarte puesto que es más duro.
Al igual que ocurre con los colchones, existen sillones con espuma viscoelástica. Su precio es mayor, pero también el confort que aporta.
Estilos de sillones que puedes comprar
Por último, a la hora de decidir qué sillón para salón comprar, es evidente que hay que evaluar su estilo.
- El sillón de club, también conocida como butaca Chéster, es uno de los más conocidos: es ancho pero profundo, por lo que no siempre resulta cómodo.
- El sillón isabelino: es el modelo de sillón para salón más clásico. Se identifica por su respaldo más alto, casi siempre como sillón orejero, y en ocasiones tapizado en capitoné, que remarca su aire clásico.
- Sillones estilo escandinavo: presentan líneas más puras y geométricas.
- Sillones de diseño: considerados como clásicos, son reproducciones de los sillones creados por los grandes diseñadores.
La forma de las patas influye en la estética general de cada uno de los modelos de sillones para salón que puedes incorporar a tu vivienda: más anchas, en U, de madera o metálicas, con pata única o con 4 integradas.
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